La antropología en decadencia, de Noe Fajardo Pérez

LA ANTROPOLOGÍA EN DECADENCIA.

Etimológicamente se traduce Antropólogo="Tratado del hombre".
Se supone, se supondría.., o símplemente yo supongo que esta disciplina no científica, o científica (como a ud. le funcione mejor la visión de ella)...
Así como los científicos de todas las disciplinas se reúnen en Congresos, Mesas redondas, etc. Para investigar acerca de su disciplina afín y lanzar hipótesis, teorias y resultados de su trabajo profesional, obedeciendo a sus principios humanos y científicos.., o será al revés (ud que cree). Porque primero fueron humanos ya que sintieron, rieron y lloraron antes de ser científicos (con todo el respeto que nos merecemos mutuamente). Después se formaron como científicos, y obedeciendo a sus principios tienen que rendir cuenta de su trabajo para dignificación de el, o más bien su propia dignificación como ser humano y la de su ciencia a la que sirve específicamente. En este tenor se antepone el ser humano al ser científico y por ende creo que el trabajo del antropólogo debería de estar por encima de las demás ciencias (por definición propia).
Esto implica que el medio antropológico tiene un compromiso muy grande. Y debería tener una visión de la humanidad desde su más remoto pasado, su devenir histórico, pasando sobretodo por el presente para dilucidar problemas que estamos originando hoy y detonarán en un futuro mediato o inmediato.
Un ejemplo en nuestra sociedad mexicana es cuando los medios de comunicación sacaron a la luz los "Derechos de los niños". Lo vimos (la mayoria, creo) con buenos ojos, pero no nos detuvimos a pensar en que nuestros niños también necesitaban un mensaje de que también tienen obligaciones que cumplir, además de los derechos. Esto trajo como consecuencia los llamados "ninis".
Aquí creo que nuestros antropólogos, sociólogos, historiadores y demás brillaron por su ausencia.
Dice en un reportaje del 18 de mayo el antropólogo británico Tim Ingold en la revista enie.clarin.com:
"El punto es que cada disciplina no es más que un grupo de gente haciendo cosas y conversando. A esa conversación se une mucha gente, cada uno con su propio campo de referencia, en términos de a quiénes leyeron, dónde estuvieron, en que país estudiaron."
Es una triste realidad pero nuestro medio científico que se dedica a aquello del "estudio del hombre" está plagado de una soberbia que lastima el principio mismo del antropólogo, y más a la sociedad a la que se debe.